Furioso. El atrevimiento de la opinión sobre teoría musical, derivada del hecho de que respirar (y, por tanto, decir gilipolleces) sea gratis.
Siempre didáctico, y siempre en aras de la difusión de la música y las letras, me pongo manos a la obra.
Una vez aclarada la afinación de la guitarra en Mim4/7 (y las diferencias entre los lados derecho e izquierdo), prosigo con la instrucción, que el saber no ocupa lugar.
Habiendo aclarado las diferentes formas de alterar una tríada con sólo elevar un dedo, procedo a la afinación de la guitarra. Tema peliagudo, porque el afinador cromático viene en notación sajona.
Por suerte, además de andarme como Pedrete por su casa en ambas notaciones, mi inglés es lo suficientemente pasable como para abordar el tema.
Acabada la lección de música, abordo la tarea de enseñar rima, metro y modales a otro mentecato. El Lémur anda guerrero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario